EL DÍA DE LOS MUERTOS
En este segundo capitulo de Méjico, hablaremos del significado de la fiesta más emblemática del país: El día de los muertos. Bajo nuestra experiencia sobre esta en nuestro periplo mejicano!!!
EL DÍA DE LOS MUERTOS
El arraigo a una mágica fiesta , la escasez de señales y nuestro espíritu aventurero hizo que nos cruzaramos con Severino de 82 años y su hermana Cristina de 74 que portaba un hermoso ramo de flores. Allí estaban los dos, en la orilla de un camino en medio de la nada. Les preguntamos por la dirección de un pueblo de artesanos. Severino nos indicó. Y nos pidió que le dieramos “un ray”, es decir, que los llevaramos hasta el comienzo del sendero que llevaba al cementerio. Todo el trayecto, en el que perdimos la noción del tiempo, se imgregnó de curiosas anecdotas sobre la vida de Severino y Cristina.Nos hablaba con voz serena, con parsimonia y en un castellano antiguo con mezcla de “mejicano” algo dificil de etender.
Coincidió con la celebración del día de los muertos. Fuimos testigos de cómo se vive parte de esta tradición .Nos contaron que iban al cementerio para visitar y adornar con flores de cempasúchil o flor de muerto las tumbas de sus antepasados , como es costumbre los días 1 y 2 de noviembre.
Y en sus hogares montan altares con la imagen del difunto, nopal o incienso, agua, panes, dulces con forma de calaveras y las comidas predilectas de los fallecidos. Para que las almas queridas abandonen el más allá y vaguen unos cuantos días por el mundo, visitando a su familia, casa y amigos. Todos los familiares se preparan para recibir a las almas de los seres queridos que han abandonado esta vida.
Este “ray” fue unas de las cosas mas maravillosas de nuestro viaje a Méjico. Ameno, hermoso, repleto de humildad. Las palabras y acciones de Severino tan llenas de fé, emoción y pureza,nos hicieron comprender la conmocion que esta fiesta tan antigua provoca en el pueblo mejicano.
El colorido , la creencia,la historia, el acervo, la religión, la alegria, el llanto, la vida, la muerte, el misticismo se aúnan para vivir este momento.
Es una época de retornos. Vivos y muertos se reúnen nuevamente. Y así de familia en familia, de una generación a otra, esta milenaria tradición se continua manteniendo a través de los siglos.
Gracias Severino y Cristina por ocupar otro pedazo de nuestro corazón y del mundo ikkelele!!!